El 91 % de los 1,900 trabajadores de la planta, situada a unos 150 kilómetros al suroeste de Toronto, aprobaron el convenio, que tendrá una vigencia de tres años, durante una votación realizada el domingo y cuyos resultados fueron dados a conocer hoy.
Según el acuerdo, GM invertirá 1,000 millones de dólares canadienses (780 millones de dólares estadounidenses) para transformar la planta que en estos momentos produce el todocaminos SUV Chevrolet Equinox y convertirla en su cuarta instalación en Norteamérica dedicada a la producción de vehículos eléctricos.
La inversión permitirá que la planta de Ingersoll produzca el BrightDrop EV 600, una nueva línea de vehículos eléctricos que GM reveló la pasada semana.
El presidente de Unifor, Jerry Dias, declaró en un comunicado que el acuerdo "es el resultado de la colaboración con los Gobiernos de (la provincia de) Ontario y el federal, así como con General Motors".
La semana pasada, GM reveló en la feria de la electrónica Consumer Electronics Show (CES) de Las Vegas la creación de una nueva marca denominada BrightDrop para la producción de furgonetas de reparto eléctricas para compañías como FedEx o UPS.
BrightDrop ofrecerá inicialmente dos productos. El EP1, una carretilla eléctrica para mover paquetes y el EV600, una furgoneta eléctrica de reparto similar a las camionetas que utilizan las empresas de paquetería FedEx o UPS.
BrightDrop también ofrecerá software y servicios a un sector de reparto de paquetes, comidas y otros productos que para 2025 representará un mercado de 850,000 millones de dólares en Estados Unidos.
La reconversión de la planta de Ingersoll es la tercera transformación del sector del automóvil de Canadá para producir vehículos eléctricos.
A finales del año pasado, Ford anunció la inversión de 1,800 millones de dólares canadienses (1.410 millones de dólares estadounidenses) para reconvertir su planta de Oakville, también en las cercanías de Toronto, en una instalación de vehículos eléctricos.
Y Fiat Chrysler, que tras su fusión con PSA se llama Stellantis, invertirá 1,580 millones de dólares canadienses (1238 millones de dólares estadounidenses) para producir vehículos eléctricos e híbridos a partir de 2024 en su planta de Windsor.