Procter & Gamble (P&G) anunció que ha llegado a un acuerdo para vender, por 1,500 millones de dólares, su marca de patatas fritas Pringles a la compañía Diamond Foods, con lo que se desprende así del último negocio que le quedaba relacionado con la alimentación.
Diamond pagará los 1,500 millones de dólares en acciones propias, de forma que P&G recibirá 29.1 millones de títulos de la compañía compradora, con sede en California, y pasará a controlar el 57 por ciento de su capital.
Además, Diamond -que verá cómo se triplica su tamaño con esta operación y cómo su facturación alcanza los 2,400 millones de dólares anuales- asumirá los 850 millones de dólares de deuda que acumula Pringles, según detallaron ambas empresas en un comunicado conjunto.
P&G, uno de los treinta componentes del índice bursátil Dow Jones de Industriales, se desprenderá así de su último negocio relacionado con la alimentación, para centrarse en la fabricación de productos para el cuidado del hogar y la higiene personal.
"Pringles es una icónica y millonaria marca de tentempiés con una significativa presencia a nivel mundial", dijo el presidente y consejero delegado de Diamond Foods, Michael Mendes, quien se mostró confiado en que su compañía podrá "crear valor para sus accionistas durante muchos años".
Pringles, con presencia en 140 países, pasará así a formar parte de las marcas de Diamond Foods, entre las que se encuentran Diamond of California, Emerald, Pop Secret o las patatas fritas Kettle.
Hacia el ecuador de la sesión en el mercado Nasdaq las acciones de Diamond Foods se disparaban el 7.41 por ciento, mientras que en lo que va de año han subido el 15.57 por ciento.
Las acciones de Procter & Gamble se dejaban en cambio el 0.61 por ciento en la Bolsa de Nueva York, donde han bajado un 3.81 por ciento en lo que va de 2011.