A su regreso la periodista agradeció las numerosas flores que le enviaron a la emisora como un gesto de amistad e hizo un reconocimiento a MVS, que "dio el paso y revirtió" su despido.
Su salida de la emisora, que calificó en su día como un "hecho ominoso", "autoritario, desmedido e inaceptable", fue motivada por haberse hecho eco de una pancarta colocada en la Cámara de los Diputados en la que se leía: "¿Tú dejarías a un borracho conducir tu auto? No, ¿verdad?, ¿y por qué lo dejas conducir al país?".
En la pancarta, colocada por el Partido del Trabajo, se veía junto a esa leyenda una foto del presidente de México, Felipe Calderón, y la periodista se preguntó en su programa si el gobernante tenía o no problemas de alcoholismo y pidió a la Presidencia de la República que aclarara públicamente el asunto.
Tras ello MVS le pidió a la comunicadora que se disculpara, lo que no sucedió. Fue despedida el 7 de febrero, pero el día 15 se anunció que la decisión había sido revertida por la emisora que respondía así "de manera pública y transparente a los requerimientos de una relevante porción de radioescuchas y ciudadanos".
Al retomar la emisión Aristegui dijo hoy que lo sucedido colocaba a todos "en una nueva perspectiva, la de una relación más estrecha, más responsable, más comprometidas con nuestras audiencias", y agradeció a la familia Vargas, propietaria de MVS, haber encontrado una solución al asunto.
Su retorno fue celebrado por el relator de la ONU sobre promoción y protección del Derecho a la Libertad de Opinión y de Expresión, Frank La Rue, en un comunicado en el que pidió al Estado mexicano "propiciar los cambios de fondo que requiere el ejercicio de la libertad de expresión" en el país.
"En México prevalece un contexto adverso para la diversidad y el pluralismo" en los medios de comunicación, según La Rue, que considera que el regreso de Aristegui al aire es "una oportunidad propicia" para seguir impulsando "las transformaciones estructurales" necesarias para cambiar ese panorama.
La ONU considera que México necesita "adoptar un marco normativo que brinde certeza jurídica, promueva la desconcentración de la radio y la televisión, y contribuya a generar un espacio mediático plural y accesible a todos los sectores de la población", sobre todo a la radiodifusión comunitaria.
Cuando estalló la polémica por el despido de Aristegui, la Presidencia de México afirmó que no presionó para que la periodista saliera del aire y subrayó el "buen estado de salud", "fortaleza física" y "entereza" de Calderón.