Esta nueva infraestructura está compuesta por 148 estanques, con una superficie de 348 mil 401 metros cuadrados y una capacidad para producir alrededor de 191 toneladas durante su primer año de operación, así como un potencial para operar 14 hectáreas de engorda, lo que permitirá que en un mediano plazo se alcancen tres mil toneladas al año.
Posteriormente, ambos funcionarios realizaron un recorrido por el Centro Nacional de Referencia de Control Biológico (CNRCB), adscrito al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), el cual tiene como función el desarrollar y establecer estrategias de control biológico para plagas, además de generar y proporcionar tecnología alternativa al uso de plaguicidas químicos.
De igual modo, coadyuva con programas y campañas fitosanitarias en las que se promueve el uso de organismos benéficos como agentes de control biológico, todo esto con la finalidad de fortalecer la sanidad de los cultivos vegetales en México, coadyuvando en el incremento de su productividad y calidad agrícola.
En su recorrido por las instalaciones del CNRCB, se explicó que el control biológico es una tecnología que introduce o manipula poblaciones de organismos benéficos en los cultivos agrícolas para disminuir la presencia de las plagas y evitar que causen daño a los vegetales.
Bajo este principio los organismos benéficos son enemigos naturales que tienen capacidad de atacar y matar a aquellos que dañan a las plantas cultivadas.
Esta tecnología se ha aplicado para el control de insectos, ácaros, caracoles, algunos vertebrados, así como algas y hongos, entre otros.
El Senasica-órgano desconcentrado de la Sagarpa- desarrolla diversos programas con la finalidad de contar con una alternativa amigable con el ambiente y de protección a la salud pública.