La organización ambientalista Greenpeace entregó este jueves a la cementera Ecoltec, filial de la empresa Apasco, un certificado como industria sucia, porque sus emanaciones y desechos contaminan gravemente a los municipios de Atotonilco y Apasco, en Hidalgo.
Integrantes de esa agrupación se presentaron en las oficinas centrales de Ecoltec ataviados con trajes color blanco y mascarillas para protestar contra las actividades de esta empresa.
En el lugar, Cecilia Navarro, directora de Comunicación de Greenpeace México, pidió a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) revocar la certificación que recién le otorgó a la empresa.