El proyecto fue adoptado por consenso por los cancilleres y representantes de los 35 países miembros que asisten aquí a la 45 Asamblea General, sin la discusión que precede usualmente la aprobación de propuestas como esta.
En sus siete puntos resolutivos, la resolución estableció las acciones que deberán implementar tanto el Secretario General, Luis Almagro, como el Consejo Permanente de la OEA para que implementen la llamada “visión estratégica”.
Para ello los países otorgaron al Consejo Permanente las facultades para que, de conformidad con lo previsto en el Articulo 4 de las Normas Generales, autorice los ajustes necesarios a la estructura organizacional de la Secretaría General a fin de adecuarla a la visión estratégica.
En este sentido Almagro fue instruido a someter a consideración del Consejo Permanente, “la racionalidad y los ajustes que considere necesarios a la estructura de la secretaría general, a más tardar el 31 de julio de 2015”.
Igualmente se facultó al consejo a autorizar las transferencias de recursos entre las cuatro áreas de la reforma, y lo autorizó para que pueda llevar a cabo los ajustes “de manera excepcional y a su criterio” en el porcentaje contenido de gastos de personal.
También se instó a los estados miembros a trabajar de manera que se puedan “mitigar las vulnerabilidades financieras de la organización”.