De confirmarse la disminución de recursos, se corre el riesgo de incumplir uno de los objetivos del Sistema Educativo Nacional, de ser una prioridad para abatir la deserción de los niños y jóvenes que aún no terminan la educación básica.
Ante ello, la diputada federal por Baja California Sur, impulsa un punto de acuerdo por el que exhorta al titular del Ejecutivo federal, a través de la SHCP, a que en el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2016, incremente el monto destinado al Programa Nacional de Becas o, en su defecto, mantenga el presupuestado para el ejercicio fiscal del 2015.
Precisó que en los “Pre-Criterios” de política económica para el 2016 sobre el cumplimiento de las disposiciones contenidas en la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, artículo 42 fracción I, se prevé iniciar un diálogo con el Congreso de la Unión sobre las perspectivas económicas y de finanzas públicas para el ejercicio fiscal 2016.
El exhorto turnado a la Tercera Comisión de la Permanente, señala que el Programa Nacional de Becas tiene como finalidad asegurar mayor cobertura, inclusión y equidad educativa, a través del otorgamiento de becas que favorezcan el acceso y disminuyan y prevengan el abandono escolar por falta de recursos o situaciones de vulnerabilidad.
Subraya que es necesario evitar la reducción de recursos destinados a dicho programa, a fin de cumplir con el objeto planteado en el Plan Nacional de Desarrollo. Se requiere crear nuevos servicios educativos, ampliar los existentes y aprovechar la capacidad instalada de los planteles, así como incrementar los apoyos a niños y jóvenes, añadió.
Reforzar la educación inicial, especialmente entre los grupos menos favorecidos, es esencial para contar con cimientos sólidos para la equidad, la igualdad de género y la inclusión. Asimismo, es indispensable reforzar las oportunidades de formación de la población adulta en condición de rezago educativo.
El punto de acuerdo detalla que el artículo tercero de la Carta Magna establece el derecho de todos los mexicanos a recibir educación por parte del Estado. “La educación pública en México, además de ser gratuita y laica, ha tenido como aspiración preparar a las personas para enfrentar la vida en libertad, partiendo del valor cívico de la responsabilidad, y desarrollando a plenitud las facultades humanas”.
De esta manera, si los alumnos dejan temporalmente la escuela tendrán una mayor edad y por ende más riesgos de reprobación y de reincidencia en la deserción, lo cual se traduce en menores oportunidades para completar su educación básica en las edades normativas.
Destaca que la población de menores ingresos en ocasiones tiene menos posibilidades de acceder a una educación de calidad y concluir sus estudios, limitando también su capacidad de insertarse con éxito en actividades altamente productivas.
Finalmente, el documento considera urgente reducir las brechas de acceso a la educación, la cultura y el conocimiento, a través de una amplia perspectiva de inclusión que erradique toda forma de discriminación por condición física, social, étnica, de género, de creencias u orientación sexual, por lo que es indispensable garantizar un monto digno.