Los medios iraquíes informan en base a fuentes del Ejército que se están registrando fuertes combates. Los extremistas, señalan, están recurriendo a atentados suicidas para detener el ataque.
Por el momento no hay confirmación de las conquistas del Ejército iraquí. En el pasado informaciones similares resultaron ser falsas.
Ejército, milicias chiitas y líderes tribales sunitas iniciaron el domingo una ofensiva para expulsar a EI de Tikrit. Se trata de la mayor ofensiva que se ha emprendido contra los yihaistas en Irak. El gobierno indicó que para ello ha movilizado a 30,000 combatientes. También la fuerza aérea iraquí está atacando a los yihadistas.
Situada a unos 170 kilómetros al norte de Bagdad, Tikrit es una localidad clave como cruce de carreteras en el norte del país. La ofensiva además está considerada una prueba para medir la capacidad de las fuerzas de seguridad iraquíes de cara al ataque que quiere llevar a cabo contra el bastión de EI en Mosul, el norte del país.
El Ejército de Estados Unidos y sus aliados no han participados hasta el momento con ataques aéreos en la ofensiva contra extremistas sunitas.
Según el Departamento de Defensa de Estados Unidos no hay ninguna solicitud por parte del gobierno iraquí para intervenir, señalan medios estadounidenses. Se trata de un asunto iraquí, dijo un portavoz del Pentágono.
El Ejército de Estados Unidos y sus aliados bombardean desde hace meses regularmente posiciones de EI en Irak y Siria.
Por el contrario, la cúpula chiita iraní apoya la ofensiva al norte del Bagdad. El comandante de la Guardia Revolucionaria Ghasem Suleimani se encuentra en el país vecino como asesor y observador, según informó el lunes la agencia de noticias iraní Fars. (DPA)