El Consejo Nacional de Seguridad ucraniano aseguró que al menos cinco soldados murieron y 21 resultaron heridos en las últimas 24 horas.
Las autoridades de Donetsk señalaron a su vez que dos civiles perecieron en bombardeos de artillería contra la ciudad. Cuatro presos murieron y ocho resultaron heridos en una cárcel de la vecina ciudad de Makiivka al caer un proyectil sobre el edificio.
El portavoz del Consejo de Defensa, Andrei Lisenko, confirmó el derribo de un avión Su-24 por parte de los rebeldes el miércoles sobre la región de Lugansk. Los dos pilotos se salvaron eyectando sus asientos.
En cambio, aseguró no tener información sobre el derribo de un helicóptero Mi-24, hecho que también se habían atribuido los rebeldes.
Gran parte de los combates de hoy se centraron en Ilovaisk, una localidad al este de Donetsk que es un importante nudo ferroviario. Al menos 16 miembros de la Guardia Nacional y de voluntarios murieron alrededor de la localidad en los últimos días, según Anton Herashchenko, asesor del Ministerio del Interior ucraniano.
Un portavoz rebelde dijo a la agencia Interfax que los rebeldes han reconquistado Ilovaisk y que rodean a las tropas del gobierno a las afueras de la localidad.
Mientras tanto, el convoy de ayuda rusa sigue varado en la frontera, con los casi 280 camiones a la espera de una inspección aduanera.
Las autoridades ucranianas sí permitieron el ingreso por el oeste de ayuda procedente de Polonia con ropa, calefactores y material escolar para los niños que están en campamentos de refugiados tras huir del este del país o de la península de Ucrania, anexionada por Rusia
El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, se reunirá en Kiev con la canciller alemana, Angela Merkel, el sábado. Y el martes próximo está previsto que coincida con su homólogo ruso, Vladimir Putin, y otros altos funcionarios de la Unión Europea (UE) en una cumbre de la unión aduanera Rusia-Bielorrusia que podría servir para reducir la tensión. (DPA)
