Desacuerdo en la UE sobre posibles sanciones a Rusia

La Unión Europea (UE) se mostró hoy dividida sobre la respuesta que dar a la crisis en Crimea y sobre la imposición de sanciones contra Rusia, como quedó en evidencia durante la cumbre extraordinaria que se celebra hoy en Bruselas.

Al comienzo de la cumbre no se perfilaba ninguna línea de actuación conjunta sobre si la UE iba a imponer o no medidas punitivas contra Moscú y, en ese caso, cuándo. Las largas conversaciones sobre Ucrania y las posibles sanciones han hecho que se retrase el cierre de la cita, previsto originalmente para las 14:00 horas (GMT).

Según los diplomáticos de la UE, sería probable la imposición de sanciones suaves. Así, unas de las medidas que barajan los europeos es suspender las negociaciones para aligerar las disposiciones para la concesión de visados, así como para el nuevo acuerdo básico sobre cuestiones económicas y energéticas con Rusia.

Ambos acuerdos, que se negocian desde hace años, apenas han avanzado en todo este tiempo.

En los últimos días, fuerzas prorrusas tomaron la península de Crimea, bajo soberanía de Ucrania. Merkel acusó al presidente ruso, Vladimir Putin, de "haber violado la ley internacional con una inaceptable intervención rusa en Crimea". Rusia, por su parte, niega este extremo y habla de que en la zona hay "fuerzas de autodefensa".

Sin embargo en Bruselas no había hoy consenso alguno para imponer sanciones duras, como la prohibición de viajar y el bloqueo de cuentas. Este tipo de medidas eran las que pedía Estados Unidos, y que el gobierno de Washington aprobó hoy.

Las trabas para que la UE tome una decisión conjunta son altas porque la decisión debe ser unánime.

Y en este punto hay una fractura en Europa: Los países del este, que se sienten amenazados por Rusia, exigen adoptar medidas contra Moscú, mientras que Alemania, Holanda o Austria son reticentes y quieren dejar una puerta abierta a la solución diplomática.

En opinión de la canciller alemana Angela Merkel, las sanciones de la UE sólo serán adecuadas si Moscú no está dispuesta a emprender conversaciones diplomáticas. La dimensión de estas sanciones dependería "de cómo avance el proceso diplomático", dijo Merkel en Bruselas.

El primer ministro holandés, Mark Rutte, propuso durante la cumbre esperar a las sanciones "para dar una oportunidad a distender la situación". También el presidente de Francia, François Hollande, se manifestó a favor de un diálogo.

El jefe de gobierno austriaco, Werner Faymann, señaló:: "El que crea que se puede construir un diálogo con Rusia o tender puentes con Rusia está equivocado". El jefe de gobierno griego, Antonis Samaras, advirtió que Europa "tiene que demostrar su papel moderado".

Sin embargo, la presidenta de la ex república soviética de Lituania, Dalia Grybauskaite, se mostró contundente en Bruselas y acusó al bloque de no reaccionar con suficiente determinación a la "agresión rusa" en Ucrania: "Europa sigue sin entender lo que ocurre. Tenemos que comprender que Rusia es peligrosa", dijo.

La primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt, señaló: "Creo que tenemos que hoy tenemos que imponer sanciones políticas a Rusia".

Pero en lo que sí coincidieron muchos de los participantes es en condenar la actuación de Rusia. El primer ministro británico David Cameron pidió que la cumbre "envíe un mensaje muy claro a Rusia de que lo ha sucedido es inaceptable y tiene que tener consecuencias".

La cumbre de la UE prevé además aprobar la ayuda económica de 11,000 millones de euros para Ucrania. La correspondiente propuesta la hizo la Comisión Europea el miércoles. (DPA)