China acaba de poner en funcionamiento la combinación de túneles y puentes más larga del mundo, que cuenta con el túnel de mayor diámetro de todo el planeta (15.43 metros, con 8.9 kilómetros de largo) y con un puente sobre las aguas del río Yangtsé de otros 16.65 kilómetros.
La llamada Vía Rápida Shanghái-Chongming permite unir desde este fin de semana a la capital financiera del país con Chongming, considerada por China la tercera mayor isla de su territorio (incluida Taiwán), en plena desembocadura del río Yangtsé, que de pronto se ve convertida en una posible nueva zona de desarrollo.
Hasta la fecha, se tardaba dos horas en acceder a la isla desde el centro de Shanghái, pero con la nueva infraestructura su costa queda a unos 45 minutos por carretera, confirmó Huang Shaowen, ingeniero general para el Gran Puente del Yangtsé, que forma la parte final del proyecto.
De hecho, el puente está diseñado para soportar unos 60 mil vehículos al día, aseguró Huang a un grupo de periodistas a pie de obra.
Para su construcción hubo que tener en cuenta cómo mantener las condiciones de navegación y la seguridad del puente pese a las fuertes corrientes de la desembocadura del tercer mayor río de Asia, además de los tifones que pasan cerca de la zona todos los veranos.
Para ello, un sistema automático reducirá mediante señales de tráfico la velocidad máxima permitida cada vez que el viento supere los 35 metros por segundo, indicó.
Por su parte, el túnel, formado por dos conductos paralelos que tienen cada uno la altura de un edificio de cinco pisos, fue cavado con la mayor tuneladora del planeta, de tecnología alemana, y llega a hundirse hasta 55 metros por debajo del lecho sedimentario del río.
El túnel une Shanghái con el islote fluvial de Changxing, y tras un pequeño tramo por carretera, lo continúa el Gran Puente del Yangtsé hasta el pueblo pescador de Chenjiazhen, ya en la costa de Chongming.
Toda esa estructura se aprovecha, además de con una carretera de hasta seis carriles en el puente, con dos raíles para la línea 9 del metro local, lo que convierte al puente en el primero de este tipo que alberga a la vez carretera y ferrocarril, según Huang.
Chongming, a la que hasta ahora sólo se podía acceder en transbordador, se ha mantenido, gracias a su aislamiento, como el pulmón ecológico de la metrópoli, con una gran reserva natural, una marisma transitada por más de siete millones aves migratorias al año y abundantes áreas rurales.
Ahora, la sombra del crecimiento económico y de la necesaria expansión de Shanghái, cuyo espacio es cada vez más escaso para sus más de 20 millones de habitantes, se cierne sobre la calma de la isla.
"Tras la apertura al tráfico del puente, Chongming supone una oportunidad histórica de desarrollo", declaró Peng Chenlei, jefe del Partido Comunista de China (PCCh) de Chongming, durante su inauguración.
"También supone una oportunidad de reestructurar los sectores industriales de Shanghái", llegó a vaticinar Yu Hongsheng, profesor de la Academia de Ciencias Sociales de Shanghái.
Los expertos esperan que la vía rápida reactive la economía del norte del delta del Yangtsé, ya de por sí la zona más desarrollada del país, puesto que antes de 2012 se unirá, con otro puente fluvial de siete kilómetros, el norte de Chongming con Qidong, en la provincia de Jiangsu.
De hecho, el paso a través del Yangtsé es la pieza definitiva para consolidar la integración económica del este de China, que contará así con la red de túneles y puentes más completa del planeta.
En esa lista ya figuran el puente marítimo más largo del mundo (35.6 kilómetros, que surca la bahía de Hangzhou, en Zhejiang) y el mayor puente del globo suspendido por tirantes, el Sutong (de 32.4 kilómetros, 8.14 de ellos sobre el Yangtsé, entre Changsu y Nantong, en Jiangsu).
Con todo, según dijo Song Guoxian, responsable de la Administración Forestal local en el humedal de Dongtai, en Chongming, "deberíamos sentirnos orgullosos, ya que es sólo gracias al desarrollo económico que Shanghái puede ahora centrar su atención en proteger esta gran marisma".
Por José Álvarez Díaz