Si la evaluación de la economía es mala, tampoco tenemos altas expectativas de que mejore, así 8 de cada 10 mexicanos (78 por ciento) opinan que en 2010 la tendencia seguirá y no mejoraremos.
* 78 por ciento considera que la política se encuentra en niveles negativos respecto a hace un año, condición que supera la que se tenía al inicio del sexenio.
* Hoy la economía es con mucho, el problema a solucionar (74 por ciento).
* El porcentaje de ciudadanos que manifiestan estar de acuerdo con la forma de gobernar del presidente Calderón es del 58 por ciento.
* A lo largo del vigésimo segundo de gobierno cae 5 puntos su nivel de aprobación y sube este mismo margen su desaprobación, llegando así a su nivel más bajo de acuerdo (similar al del 1er. trimestre en el que le afectó el incremento a la tortilla) y por primera vez más de 40 por ciento lo desaprueba.
* El resultado anterior es explicado en primera instancia por el recrudecimiento de la mala situación económica y específicamente por los incrementos a algunos impuestos, que aunque entran en vigor en 2010 ya generan molestia.
* Las caídas más grandes se presentan entre los ciudadanos de nivel económico alto (8 puntos), en el centro del país (12 puntos), y los perredistas (13 puntos).
* La aprobación fuerte o incondicional se presenta en 1 de cada 4 ciudadanos, y es en este rubro donde es más evidente la disminución del acuerdo presidencial.
* Al comparar el nivel de aprobación con el que transitaron los primeros 3 años de su gestión los últimos 4 presidentes de México, observamos como Salinas fue quien mejor evaluación logra durante su tercer año (77 por ciento promedio en 1991), y que a pesar de la caída al final de 2009, Felipe Calderón supera los niveles promedio de Vicente Fox en 2003 y de Ernesto Zedillo en 1997.
* De agosto a noviembre los gobernadores se mantienen en 70 por ciento promedio, los presidentes municipales bajan 3 puntos y el presidente 5 puntos porcentuales, lo que evidencia que es el presidente quien más paga el deterioro de la economía y el incremento de impuestos.
* La lucha contra la inflación (22 por ciento); la disminución de la pobreza (24 por ciento); la creación de empleos (25 por ciento) y la defensa de los migrantes (26 por ciento) aparecen nuevamente como los 4 aspectos con menor aprobación ciudadana.
* Un dato positivo es que sube 7 puntos la percepción de que se está trabajando bien para mejorar la situación del campo.
* El atributo de tolerancia a la crítica de Felipe Calderón cae más de 4 puntos porcentuales aunque sigue siendo en el que más reconocimiento logra.
* Con algunas variaciones desde 2001 se piensa que el país no va por el camino correcto, pero al final de 2009 esta opinión alcanza al 57 por ciento de los mexicanos, la cual si bien es la mayor de este sexenio, aun está abajo del 61 por ciento de 2004.
* El decimo segundo trimestre tuvo como característica la recurrencia de noticias negativas de la economía y el incremento a muchos impuestos a aplicar en 2010; esto en cualquier lugar del mundo genera molestias y una consecuente baja en la popularidad del gobierno. Tal vez la caída de 5 puntos incluso sea pequeña al ver el tamaño del problema que enfrenta México, y también es posible que esa caída aun no termine de manifestarse.
El presidente de México Felipe Calderón llega a su tercer aniversario de gobierno hoy primero de diciembre de 2009, justo la mitad del período para el que fue electo. Antes de desglosar los resultados, son importantes los principales acontecimientos que ocurrieron en los meses de septiembre, octubre y noviembre de 2009 y que en su conjunto representan el contexto que explica las variaciones que se observaran:
1. En un mismo fin de semana la selección mexicana de fútbol califica al mundial de Sudáfrica 2010 y el gobierno desaparece la compañía de Luz y Fuerza del Centro (CLyFC).
2. La desaparición de CLyFC, justificada entre otras cosas por la ineficacia de la compañía centra un conflicto aún no resuelto con el sindicato mexicano de electricistas (SME).
3. Se aprobó el presupuesto para 2010, que contempla incrementos a muchos impuestos, entre ellos el IVA que pasa de 15 a 16 por ciento.
4. Se nombra al nuevo titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
5. Hay elecciones en Tabasco y Coahuila, en ambos triunfa el PRI derrotando al PRD y al PAN respectivamente.
6. En el gabinete, el procurador General de la República renuncia y se nombra a un nuevo procurador.
7. La inseguridad y la economía no ceden y se acentúan sus manifestaciones.
Bajo estas condiciones, era difícil esperar comportamientos positivos en las percepcionesciudadanas, tal como se verá a continuación.
A. - La economía
* Casi 9 de cada 10 mexicanos (87 por ciento) consideran que hoy la economía está peor que hace un año, este indicador, medido a lo largo de todo este siglo, se encuentra en su peor nivel, 21 puntos porcentuales de deterioro respecto al que se tenía al inicio de la gestión del
presidente Calderón.
* La consecuencia de la mala percepción de la economía es que la palabra “crisis” hoy se utiliza como no se hacía hace mucho para calificar el momento que vivimos. 2 de cada 3 ciudadanos mencionan esa palabra para evaluar a la economía nacional y solamente 8 por ciento considera que nuestra economía está fuerte.
* Y si la evaluación de la economía es mala, tampoco tenemos altas expectativas de que mejore; así 8 de cada 10 mexicanos (78 por ciento) opinan que en 2010 la tendencia seguirá y no mejoraremos.
B. – Política
* Pasados los comicios de julio podría esperarse que los pleitos políticos finalizaran y por lo tanto la percepción de la situación política mejorara; sin embargo el conflicto con el SME y la discusión sobre el presupuesto volvieron a generar opiniones negativas; 78 por ciento considera que la política se encuentra en niveles negativos respecto a hace un año, condición que supera la que se tenía al inicio del sexenio.
C. – Problemática percibida
* Aunque la “crisis económica” siempre aparece como un importante problema cuya mención resume un sentimiento de incertidumbre, el valor que se obtiene al cumplirse un nuevo aniversario de gobierno es claramente inédito para en el periodo de 2000 a la fecha, 39 por ciento de los mexicanos la mencionaron mientras hace 3 años este porcentaje apenas era de 21 por ciento. Se observa una disminución de las menciones a “inseguridad” y no porque no exista, sino que es opacada por los incrementos a problemas como “desempleo” o “impuestos”.
* Al agrupar todas las menciones de “principales problemas” en dos grandes rubros (los que se relacionan con la economía y los que tienen que ver con la seguridad) podemos ver la evolución del actual sexenio desde las preocupaciones ciudadanas y concluir que hoy la
economía es con mucho, el problema a solucionar.
D. – Evaluación de gobierno
* El porcentaje de ciudadanos que manifiestan estar de acuerdo con la forma de gobernar del presidente Calderón es del 58 por ciento igualando sus peores niveles en lo que va de su gestión; a lo largo del vigésimo segundo de gobierno cae 5 puntos su nivel de aprobación y sube en este mismo margen su desaprobación, llegando así a su nivel más bajo de acuerdo (similar al de su 1er. trimestre en el que le afectó el incremento a la tortilla) y por primera vez más de 40 por ciento lo desaprueba.
* El resultado anterior es explicado en primera instancia por el recrudecimiento de la mala situación económica y específicamente por los incrementos a algunos impuestos, que aunque entran en vigor en 2010 ya generan molestia. Si consideramos el 66 por ciento de
aprobación que alcanzaba el presidente en febrero pasado la caída ha sido de 10 puntos en 9 meses.
* Una caída de 5 puntos porcentuales en un trimestre genera en forma natural disminuciones en prácticamente todos los segmentos poblacionales, sin embargo observamos que las caídas más grandes se presentan entre los ciudadanos de nivel económico alto (8 puntos), en el centro del país (12 puntos), y en los perredistas (13 puntos); los extremo de la aprobación presidencial siguen siendo los panistas (80 por ciento) y los perredistas (35 por ciento).
* En esta ocasión agregamos una nueva gráfica que muestra el nivel de dureza con el que se aprueba al presidente. La “aprobación fuerte” consiste en el porcentaje de ciudadanos que declaran aprobar sin restricción, y la “aprobación débil” consiste en el porcentaje que declara “aprobar en parte” su trabajo. En la gráfica podemos observar que la aprobación fuerte o incondicional se presenta en 1 de cada 4 ciudadanos, y es en este rubro donde es más evidente la disminución del acuerdo presidencial.
Al comparar el nivel de aprobación con el que transitaron los primeros 3 años de su gestión los últimos 4 presidentes de México, observamos como Salinas fue quien mejor evaluación logra durante su tercer año (77 por ciento promedio en 1991), y que a pesar de la caída al final de 2009, Felipe Calderón supera los niveles promedio de Vicente Fox en 2003 y de Ernesto Zedillo en 1997.
* Si observamos la evolución promedio de los tres niveles de autoridad al que el ciudadano observa, las tres sufren mantenidas disminuciones desde febrero pasado, de agosto a noviembre los gobernadores se mantienen en 70 por ciento promedio, los presidentes municipales bajan 3 puntos y el presidente 5 puntos porcentuales, lo que evidencia que es el presidente quien más paga el deterioro de la economía y el incremento de impuestos.
E. – Aprobación por áreas de gobierno
* El combate a la delincuencia, que hace 3 meses fue el único rubro que lograba más de la mitad de respuestas aprobatorias, cayó 8 puntos y con ello los 14 rubros que medimos aparecen bajo la línea de ese 50 por ciento.
* En el otro extremo, la lucha contra la inflación (22 por ciento); la disminución de la pobreza (24 por ciento); la creación de empleos (25 por ciento) y la defensa de los migrantes (26 por ciento) aparecen nuevamente como los 4 aspectos con menor aprobación ciudadana.
*Un dato positivo es que sube 7 puntos la percepción de que se está trabajando bien para mejorar la situación del campo
* Al iniciar su gobierno, preguntamos a los mexicanos su expectativa sobre el apoyo que recibirían distintos grupos poblacionales por parte del entonces entrante presidente Calderón; en ese momento, los ciudadanos consideraron que los empresarios, los medios de comunicación y los estudiantes serían quienes más apoyo tendrían; en cambio el sur del país y los migrantes no se veían como grupo beneficiario del nuevo presidente.
* 3 años después la percepción ha cambiado ligeramente, los empresarios aparecen como el grupo más beneficiado pero solo opina así el 57 por ciento, 10 puntos porcentuales menos de lo que lograba como expectativa en 2006; los medios de comunicación aparecen 15 puntosabajo respecto a lo que se pensaba hace 3 años.
* En la parte baja de beneficiarios percibidos, aparecen los mismos mexicanos que se preveían en noviembre de 2006: los que viven en el sur del país y los que se van al norte de la frontera.
* Como medida que resume para muchos el verdadero nivel de la aprobación presidencial,porque elimina el carisma personal y se concentra en el control general del país, observamos que 58 por ciento considera que “las cosas se están saliendo de control” nivel 3 puntos por arriba del dato que medimos un mes antes.
F. – Atributos del presidente
* Al evaluar los atributos personales del presidente Calderón, el trimestre 12 no es favorable para ninguno de los siete que permanentemente evaluamos; la tolerancia a la crítica, que siempre ha sido su mejor atributo, cae más de 4 puntos porcentuales aunque sigue siendo el que más reconocimiento logra.
G. – Rumbo del país
* La percepción de economía, política, seguridad, evaluación presidencial y muchas otras producen un estado de ánimo que se traduce en la percepción de rumbo del país. Con algunas variaciones desde 2001 se piensa que el país no va por el camino correcto, pero al final de 2009 esta opinión alcanza al 57 por ciento de los mexicanos, la cual si bien es la mayor de este sexenio, aun está abajo del 61 por ciento de 2004.
Conclusión
Para nadie debe ser una sorpresa que la aprobación presidencial arribe en su nivel más bajo, el decimo segundo trimestre tuvo como característica la recurrencia de noticias negativas de la economía y el incremento a muchos impuestos a aplicar en 2010; esto en cualquier lugar del mundo genera molestias y una consecuente baja en la popularidad del gobierno. Tal vez la caída de 5 puntos incluso sea pequeña al ver el tamaño del problema que enfrenta México, y también es posible que esa caída aun no termine de manifestarse.
Para el siguiente trimestre, que finaliza el 28 de febrero de 2010, la medición incluirá, entre muchas cosas, algunos eventos que ya podemos adelantar, como la entrada en vigor del incremento autorizado en impuestos y en el precio de servicios. El saldo en la aprobación de todo lo que suceda en 3 meses lo registraremos como es costumbre en estos reportes trimestrales.