Hay una evidencia creciente de que la economía global puede estar finalmente estabilizándose, con el fin de la reducción de existencias industriales unido a los efectos de las intervenciones gubernamentales", señaló la AIE en su informe mensual de perspectivas publicado hoy.
En ese informe, calculó que el consumo mundial de petróleo será este año de una media de 84.4 millones de barriles diarios, 490 mil barriles diarios más de los que preveía en agosto, lo que no impedirá que la cifra suponga un retroceso del 2.2 por ciento respecto a 2008.
La agencia también revisó al alza sus estadísticas para 2010, y ahora piensa que la demanda será de 85.7 millones de barriles diarios, 450 mil barriles diarios más de lo que había anunciado el mes pasado.
Esas correcciones se deben en buena medida a unas expectativas superiores para Norteamérica (270 mil barriles suplementarios cada día tanto este ejercicio como el próximo).
Aun con ese elemento nuevo, el consumo de crudo en el conjunto de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) sufrirá un bajón del 4.7 por ciento este año, para quedar en 45.5 millones de barriles diarios, y sólo subirá un 0.1 por ciento en 2010.
Al margen del mundo desarrollado, la AIE también ha incrementado sus previsiones, en particular por una mayor demanda de China, debido al efecto de las políticas gubernamentales de estímulo y al significativo proceso de elevación de las reservas del país.
Igualmente se han elevado las cifras de las necesidades de petróleo en Latinoamérica y los países de la antigua Unión Soviética.
Pese a estos elementos positivos, la AIE quiso poner el acento en que "la demanda sigue siendo débil en la OCDE para el resto de este año, mientras la subrayada fortaleza de los otros países se ha visto oscurecida por la masiva constitución de reservas en China".
En ese contexto, "no se puede descartar totalmente" el "espectro" de una evolución en "W" con una nueva recaída.
Por lo que se refiere a la oferta de crudo, la agencia, que había finalizado su estudio mensual antes de la reunión de la OPEP de anoche, apostaba porque el cártel petrolero no recortara más sus cuotas debido a la evolución de las necesidades.
A ese respecto, los autores del informe han subido en 600 mil barriles diarios hasta 28.3 millones en el tercer trimestre sus cálculos sobre la demanda para los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Para los tres últimos meses del año, también estiman que el cártel petrolero debería poner en el mercado 600 mil barriles diarios más de lo que había previsto anteriormente, es decir, 27.9 millones de barriles diarios en ese trimestre.
Para 2010, la cifra global es de 28.2 millones de barriles diarios de media, lo que supone un alza de la demanda de 400 mil barriles respecto a la anterior evaluación.
De entrada, en agosto se redujo en 400 mil barriles diarios la disponibilidad de crudo, con 84.9 millones de barriles, debido a un descenso de 450 mil barriles en la aportación de los productores que no pertenecen a la OPEP.
Durante el mes de julio, las reservas industriales de petróleo en la OCDE aumentaron en 12.8 millones de barriles para totalizar 2 mil 778 millones, lo que representa 61.8 días de consumo, una cifra equivalente a la de un mes antes.
Los datos preliminares apuntan a que en agosto se ha producido, sin embargo, un descenso de esas reservas de 7.7 millones de barriles.
La AIE constató que en los primeros días de septiembre, el barril de petróleo ha caído unos siete dólares y su precio se sitúa entre 71-73 dólares, una evolución que vincula con el hecho de que "un número creciente de analistas están tomando una visión a largo plazo", dando a entender que remiten algunos movimientos de carácter más especulativo.