Las mujeres que trabajan en la agricultura de forma no remunerada constituyen el universo más numeroso pero menos conocido de las mujeres dedicadas a las actividades agrícolas, asegura este organismo en un comunicado fechado en Santiago de Chile.
En su mayoría, además, son invisibles para las estadísticas oficiales, ya que en la región el 56 por ciento de las mujeres rurales mayores de 15 años se registra como población inactiva pese a que sí trabajan.
Es más, según las encuestas de uso del tiempo, el 60 por ciento de las mujeres "inactivas" en Ecuador y el 50 por ciento en Guatemala y México producen alimentos para el consumo de sus familias.
Según la FAO, el 82 por ciento de estas mujeres vive en hogares cuyos ingresos provienen exclusivamente de la actividad agrícola, un 14 por ciento en hogares mixtos, un 3 por ciento en hogares no agrícolas y el 1 por ciento restante en hogares que dependen de transferencias del Estado o remesas.
"El primer desafío es fortalecer su voz para que los Estados construyan políticas de apoyo productivo y de protección social, que respondan a sus necesidades como mujer productora y como integrante de una familia", explicó en el texto Soledad Parada, experta de la FAO. (EFE)