"Una manifestación sería inapropiada", señaló en rueda de prensa el portavoz del COI Mark Adams un día después de que dos activistas de la banda musical crítica con el Kremlin fueran detenidas en Sochi.
Nadeshda Tolokonnikova y Maria Alyojina, integrantes de Pussy Riot, fueron interrogadas junto al defensor de los derechos humanos Semyon Simonov y varios periodistas.
Al parecer, el interrogatorio estaba relacionado con un robo en su hotel. Tolokonnikova y Alyojina fueron puestas más tarde en libertad sin cargos.
"Ocurrió en Sochi, pero no estaba relacionado con una protesta contra los Juegos", señaló Adams.
El portavoz del COI puso de ejemplo a la activista italiana Vladimir Luxuria para resaltar la tolerancia cero que tiene el ente recto del olimpismo con las manifestaciones políticas.
"Ella pasó dos horas andando por el parque dando a conocer sus opiniones. Es un buen caso para demostrar por qué tenemos que mantener los Juegos separados de las manifestaciones que no estén relacionadas con los Juegos".
"Fue escoltada gentilmente hasta la salida y ahora creo que está en Italia", añadió Adams.
"No somos Naciones Unidas", dijo en referencia a las protestas.
Numerosas organizaciones internacionales denuncian la violación de los derechos humanos en Rusia. Los Juegos de Sochi son vistos como un proyecto de prestigio del presidente ruso, Vladimir Putin.(DPA)