La vocera presidencial, Sarah Sanders, evitó empero confirmar o negar reportes de prensa de que el mandatario habría discutido invitar a Putin a la Casa Blanca, como parte de su estrategia de acercamiento con el líder ruso.
“Los dos discutieron una reunión bilateral ‘en un futuro no muy distante’ en un número de sedes potenciales, incluyendo la Casa Blanca. No tenemos nada que agregar en este momento”, dijo Sanders en una declaración circulada a periodistas.
Aunque dos semanas atrás Trump anunció su intención de tener una reunión bilateral con Putin, ni el mandatario ni la Casa Blanca revelaron entonces que el tema había sido discutido en la conversación por teléfono que sostuvieron entonces.
Trump conversó con Putin el 20 de marzo pasado para felicitarlo por su triunfo en las elecciones presidenciales de Rusia, y dijo que el eventual encuentro que celebre con este sería para discutir la carrera armamentista.
La semana pasada Trump ordenó la expulsión de 60 funcionarios diplomáticos y el cierre del consulado ruso en Seattle, en respuesta por el ataque con arma química en el Reino Unido contra un exespía ruso y su hija, a principios del mes pasado.
La Casa Blanca caracterizó entonces como “inaceptable” el alto número de funcionarios de inteligencia rusa que están adscritos tanto a la embajada como consulados, dejando abierta la posibilidad para medidas adicionales en este sentido.
El cierre del consulado en Seattle, Washington, obedeció a su proximidad con una base de submarinos, así como a los cuarteles generales de la fábrica de aviones Boeing, que es a la vez uno de los mayores contratistas militares del gobierno estadunidense.