Los resultados de la empresa con sede en Luxemburgo, después de dos trimestres consecutivos de pérdidas, contrastan con los primeros nueve meses de 2018, cuando la empresa obtuvo un beneficio de 3,956 millones de dólares (3,571 millones de euros).
La deuda bruta de la firma entre enero y septiembre pasados se situó en 14,300 millones de dólares (12,909 millones de euros), frente a 13,800 (12,458 millones de euros) registrados hasta el pasado junio.
La empresa auguró una reducción de la demanda de acero en Estados Unidos de entre un 0.5 % y un 1 % por la debilidad del sector automovilístico y a la desaceleración de la demanda de maquinaria y también en Europa (hasta un 3 %), por la ralentización del mismo sector y el de la construcción.
Pese a los resultados anunciados, el grupo siderúrgico encabezó hoy los avances del IBEX 35, con una subida del 6.48, de las más importantes en los últimos años.
El consejero delegado de la firma, Lakshmi Mittal, indicó en un comunicado que la compañía ya había anticipado un mercado difícil entre julio y septiembre, debido a los bajos precios y a los altos costes de la materia prima.
"Con esta situación en los mercados, continuamos centrando nuestros esfuerzos en impulsar nuestras propias iniciativas encaminadas a mejorar el rendimiento y situar nuestra prioridad en reducir los costes, adaptar la producción y asegurar que la Empresa siga generando un flujo de tesorería positivo", dijo.
La firma mantiene las previsiones que "apuntan a una sustancial liberación de capital circulante en el cuarto trimestre, lo cual debería permitir seguir reduciendo el endeudamiento neto en términos interanuales", añadió.
Los ingresos de la firma entre enero y septiembre ascendieron a 55,101 millones de dólares (49,743 millones de euros), comparado con 57,706 millones de dólares en los primeros nueve meses de 2018 (52,094 millones de euros).
El resultado bruto de explotación (EBITDA) alcanzó 4,270 millones de dólares (3,854 millones de euros), frente a 8,314 millones de dólares (7,505 millones de euros) un año antes.
Los resultados del tercer trimestre fueron de una pérdida neta de 539 millones de dólares (486 millones de euros), ingresos por valor de 16,634 millones de dólares (15,016 millones de euros) y un EBITDA de 1,063 millones de dólares (959 millones de euros), informó la empresa.
Con vistas a los próximos meses, la empresa indicó que teniendo en cuenta el crecimiento anual y las previsiones económicas actuales se espera que el consumo de acero crezca este año entre un 0.5 % y un 1 %.
Por regiones, frente a la reducción de la demanda en Estados Unidos y Europa el gigante siderúrgico prevé un crecimiento de entre el 1.5 % y el 2 % en China.
"Dadas las expectativas de demanda, los envíos de acero del grupo se esperan estables en 2019 frente a 2018", indicó la firma.
ArcelorMittal anunció el pasado 6 de mayo que reduciría temporalmente su producción de acero en Europa en tres millones de toneladas en términos anualizados, lo que incluía un descenso de 700,000 toneladas en sus plantas de Asturias.